Comienza la última fase de las obras para transformar la calle del Progreso en una zona de viandantes

Esta semana comienzan los trabajos de la última fase del proyecto de reforma urbanística para transformar la calle del Progreso, uno de los primordiales ejes ciudadanos de Collblanc-la Torrassa, en una zona de viandantes. Las obras afectan ahora a la zona del Mercado de Collblanc, entre las calles de Pujós y de Occidente.

Las obras de reforma de la calle del Progreso comenzaron el mes pasado de octubre y está previsto que concluyan en otoño. La primera fase se ejecutó en el tramo comprendido entre las calles del Montseny y de Pero, más tarde se actuó entre las calles de Masía y de Pujós, y recientemente entre la calle de Occidente y la carretera de Collblanc.

Los trabajos que comienzan esta semana en el tramo comprendido entre las calles de Pujós y de Occidente afectan al recolector de la zona, que va a ser limpiado y más tarde rehabilitado. El mes de julio se comenzará la actuación en la superficie. Mientras que duren las obras, este tramo se sostendrá cortado al tráfico y solo se dejará el acceso al aparcamiento de la plaza del Mercado de Collblanc, con la entrada y salida limitada por una sola rampa.

El objetivo de esta actuación urbanística al conjunto de la calle del Progreso, que tiene un presupuesto de uno con uno millones de euros, es crear una extensa zona de viandantes en el centro del distrito de Collblanc y, al tiempo, fortalecer el eje comercial que une la plaza De España con el mercado del distrito.

Entre la carretera de Collblanc y la calle de Pujós, se cambia el sentido y se convierte en una calle de viandantes y, por consiguiente, se limita el tráfico a los automóviles que no deban acceder por una necesidad específica (acceso a aparcamiento y servicios de carga y descarga). Entre las calles de Pujós y del Montseny no se invierte el sentido de circulación y el acceso de automóviles va a quedar controlado por cámaras.

Con la reforma, la calle del Progreso queda configurado con una sección asimétrica con una acera de dos con setenta m, en la que se instalan los puntos de luz, una calzada de tres con cincuenta m y otra acera de tres con ochenta m, con árboles y los ensanchamientos de calzada en aquellos lugares acotados como espacios de carga y descarga.

Esta configuración asimétrica de las aceras se alterna de lado en diferentes islas durante la calle, que se acomoda en su totalidad a la normativa para personas con movilidad reducida. Por otro lado, asimismo se gana superficie libre en la plaza del Mercado de Collblanc, en la zona ocupada hasta el momento por la parada de autobús y sus accesos.

El proyecto incluye asimismo la renovación de la instalación del iluminado público, con nuevos puntos de luz con tecnología led, más eficaces y de menor consumo; de la red de recogida de aguas superficiales, con nuevos embornals sifònics, y del conducto de alcantarilla existente a la calle del Progreso, entre las calles de Occidente y de Fortuny.

Con el fin de asegurar la nueva funcionalidad de la calle como espacio de viandantes, se instalará un sistema de control de accesos de automóviles por lectura de matrículas. Los vecinos que deban acceder a la calle, como aquellas personas que justifiquen la necesidad, van a tener autorización para hacerlo. El automóviles que deban realizar la carga y descarga van a tener acceso en un horario limitado y por el tiempo rigurosamente preciso para efectuar esta clase de operaciones.